La Abadía de Villers se encuentra en un lugar remoto, lleno de paz, donde los monjes podían llevar a cabo su máxima “Ora et Labora“. Sus ruinas constituyen uno de los conjuntos arqueológicos más importantes y bonitos de Belgica, considerados como Patrimonio Mayor de Valonia.
Fue fundada en el año 1146 durante la radical renovación que supuso la reforma Cisterciense, por 12 monjes procedentes de a Abadia de Claraval y 5 hermanos laicos.
Sin duda lo más impactante de todo el conjunto arquitectónico es la Iglesia, 94 metros de longitud con las bóvedas de la nave a 23 metros. Sobria, siguiendo la estética cisterciente, pero imponente.
Sus cinco jardines forman parte del Patrimonio de Jardines de Valonia y están clasificados según el tipo de plantas con lo constituyen; medicinales, ornamentales, aromáticas… En verano albergan espectáculos de música y teatro.
A través de un cuaderno interactivo los niños pueden guiar a sus padres por la abadía intentando resolver un enigma con la ayuda del monje Radulphe. Es una actividad entretenida.
Durante 650 años los monjes cistercienses habitaron en el recinto y fueron adaptando el área a sus necesidades llegando a tener mucha importancia. A partir del S. XVI comienza su decadencia hasta que en 1796 la Revolución Francesa acabó con las órdenes religiosas y vendió el lugar a un mercader de materiales que desmontó la Abadía pieza a pieza y acabó siendo lo que vemos hoy. A lo largo del siglo XIX, durante el romanticismo, fueron muchos los visitantes que se acercaron a las ruinas en busca de inspiración, finalmente el Estado Belga compró el lugar y comenzó su restauración.
Es una visita sorprendente e inesperada, en medio de un bosque te encuentras estas ruinas maravillosas que te transportan a otros tiempos.
La “Ruta de las Abadías Europeas Cistescienses“ certificada por el Consejo de Europa invita a visitar el gran legado que nos dejaron los monjes de la Orden del Cister.
Para mas información
https://www.coe.int/es/web/cultural-routes/the-european-route-of-cistercian-abbeys
https://www.cister.net/abbayes/
Saludos,
I.